IMC, un indicador fiable
Fuente : BNP Paribas validado por el Hospital Universitario de Rouen
Resumen
- IMC: ¿Es fiable?
- CALCULAR SU IMC
- ¿DE DÓNDE VIENEN ESOS NÚMEROS?
- ¿CUÁL ES EL PROBLEMA?
- EL ANUNCIO DE LA AMA
- ¿Y el IMC en todo esto?
IMC: ¿Es fiable?
El IMC sigue siendo la cifra determinante para calcular el nivel de sobrepeso de una persona. Pero en junio de 2023, la American Medical Association anunció que el IMC no sería una medida confiable de la obesidad… ¿Debemos confiar siempre en esta cifra omnipresente?
CALCULAR SU IMC
La obesidad es un factor creciente en la salud mundial: desde 1975, la OMS ha constatado que el número de personas afectadas se ha triplicado, y estima que para 2030 uno de cada siete hombres y una de cada cinco mujeres se verán afectados por esta enfermedad.
Hasta ahora, el factor determinante para considerar si una persona es obesa era el cálculo del IMC (Índice de Masa Corporal), una ecuación simple. Esta cifra era de fácil acceso: para obtenerla, basta con dividir su peso en kilos por el cuadrado de su tamaño en metros (por ejemplo, si se hace 60 kg y 1 m65, hay que dividir 60 por 1,65×1,65). Si la cifra resultante se encuentra entre
25,0-29,9 kg/m2 Sobrepeso
30,0-34,9 kg/m2 Obesidad moderada
35,0-39,9 kg/m2 Obesidad severa
Plus de 40 kg/m2 Obesidad masiva
¿DE DÓNDE VIENEN ESOS NÚMEROS?
La escala del IMC se basa en las investigaciones del matemático belga Adolphe Quételet, que vivió y trabajó en el siglo XIX. Entre sus numerosos estudios, buscó obtener una manera de describir y medir «el hombre medio». Fue en el último cuarto del siglo 20, cuando el cuerpo médico comenzó a enfrentar problemas de obesidad, que los médicos y aseguradores buscaron una manera de encontrar fácilmente y rápidamente una indicación de los riesgos potenciales del peso para la salud, que el trabajo de Quételet ha resurgido. En 1972, un estudio identificó este cálculo como fácilmente aplicable por su simplicidad de cálculo. Esta «escala de Quételet» pasa a llamarse BMI (Body Mass Index) o IMC y se convierte en el principal indicador del mundo de la salud.
¿CUÁL ES EL PROBLEMA?
Ya en 1972, los científicos que propusieron la adopción del IMC como índice de medida generalizado habían identificado que no era «totalmente satisfactorio», no aplicándose a todos los cuerpos y casos de la misma manera.
Las personas muy musculosas, más grandes o más pequeñas no son necesariamente iguales ante este cálculo, por ejemplo.
Por otra parte, las cifras de Quételet se basaban en una población europea de raza blanca, sin tener en cuenta las posibles diferencias genéticas debidas al origen o al género.
Los estudios han demostrado que el IMC subestima la obesidad en los asiáticos – en Singapur, las directrices nacionales consideran que una persona es obesa a partir de un IMC de 23 – mientras que los individuos de origen polinesio o afroamericano están sobrestimados frente al IMC, y se beneficiarían de un menor nivel de grasa corporal, igual a IMC, con una persona de origen europeo.
EL ANUNCIO DE LA AMA
En junio de 2023, la American Medical Association, el mayor grupo de médicos y estudiantes de medicina de los Estados Unidos, publicó un comunicado en el que deseaba aclarar el uso del IMC para el cálculo de la obesidad y el sobrepeso. El documento destaca la utilidad del IMC para una medida general de la población, pero incita a los profesionales de la salud a tener en cuenta otras medidas (tasa de grasa corporal, tasa de grasa visceral, circunferencia de cintura, factores genéticos y/o metabólicos) en su enfoque individual hacia los pacientes.
¿Y el IMC en todo esto?
Como se señala en el comunicado, el IMC sigue siendo una base útil para estimar el sobrepeso o la obesidad. Luego, el médico o el profesional de la salud deben considerar las variables de cada uno para determinar el enfoque a seguir.
En conclusión: uno no duda en calcular su IMC para ver dónde se encuentra en la escala. Y, si es necesario, se habla con su médico para evaluar la situación.