Vínculos entre trastornos alimentarios, obesidad y redes sociales

Resumen

• Introducción
• Algunas cifras para 2022 en el mundo
• Beneficios y riesgos del uso de las redes sociales
• Pero, ¿cuándo hablamos de adicción o de uso problemático de la RS?
• La relación entre los TCA, la obesidad y las redes sociales
• Conclusión

Introducción

Las redes sociales (RS) son las distintas plataformas digitales
accesibles a través de Internet que permiten a los usuarios interactuar
entre sí, tanto verbal como visualmente. Su objetivo es la creación, el
intercambio y la visualización de contenidos sociales entre múltiples usuarios. Existen diferentes tipos de redes sociales:

• Intercambios y comunicaciones: Facebook, Twitter, Snapchat…
• Compartir fotos: Instagram, Pinterest, Flickr…
• Compartir vídeos: Youtube, Dailymotion, Tiktok, Twitch…
• Sitio de romance y citas: Meetic, Tinder, Adopte Un Mec …
• Mensajerías : Whatsapp, Messenger…
• Búsqueda de empleo y red profesional: Linkedin, Viadeo, ryze…

Las redes sociales más conocidas y utilizadas son Facebook, YouTube, Whatsapp, Instagram y Tiktok.

Algunas cifras para 2022 en el mundo

Beneficios y riesgos del uso de las redes sociales

Pero, ¿cuándo hablamos de adicción o de uso problemático de la RS?

Hay muchas razones beneficiosas para el creciente uso de las redes sociales. Sin embargo, como muestra la figura anterior, por cada beneficio de las redes sociales puede haber un riesgo. Este equilibrio entre los beneficios y los riesgos de las redes sociales depende principalmente de nuestro uso y actitud de comportamiento hacia ellas. Aunque actualmente no hay consenso sobre la definición de adicción o uso problemático de las redes sociales, la literatura científica parece definirla como : un hábito repetitivo que es difícil de abandonar y que aumenta el riesgo de enfermedad y/o está asociado a problemas personales o sociales. Este uso problemático o adicción se asocia a menudo con la noción de pérdida de control.

La relación entre los TCA, la obesidad y las redes sociales

El uso problemático / la adicción a la RS puede tener muchas consecuencias negativas, incluso en la salud física y mental de los usuarios:

→ Contribuir a la difusión de un ideal de adelgazamiento

Nuestra sociedad, sobre todo a través de los medios de comunicación,
preconiza un ideal de adelgazamiento mediante la difusión de
siluetas estandarizadas en las que la delgadez es un criterio
sistemático. Esta exposición repetida, reforzada con la aparición de
redes sociales, a un ideal de delgadez a veces irreal, favorece el
desarrollo de la interiorización de la delgadez, es decir, la integración
mental de un ideal de delgadez definido socialmente y asociado a un
impacto psicológico y cognitivo en la persona.

→ Fomenta la baja autoestima y aumenta la ansiedad

Sin embargo, la literatura científica subraya que una fuerte interiorización de la delgadez y las redes sociales favorecen una disminución de la autoestima que conduce, por el contrario, a un aumento de la insatisfacción corporal, la ansiedad y la depresión.

→ Contribuir al desarrollo de trastornos alimentarios

Así, el uso de las redes sociales aumenta el riesgo de preocupación por el cuerpo y, por tanto, de insatisfacción corporal; el tiempo diario en las redes sociales se asoció positivamente con el riesgo de sufrir trastornos alimentarios.

→ Aumentar el riesgo de adicciones

Otros estudios en la literatura han destacado el impacto de las redes sociales en el riesgo de adicciones como el alcohol, el tabaco o el cannabis. De hecho, las personas que publican fotos relacionadas con el alcohol tienen 2,34 veces más probabilidades de tener un consumo excesivo de alcohol, lo que está relacionado, en particular, con la normalización de las conductas adictivas.

→ Alterar la actividad física y los patrones de sueño

• En los adolescentes, el uso de las redes sociales se asoció con una mayor probabilidad de realizar ejercicio físico estricto o hiperactividad física o de saltarse comidas para cambiar de peso. Por el contrario, el tiempo que se pasa en las redes sociales fomenta el comportamiento sedentario, que contribuye al desarrollo de trastornos compulsivos y a la obesidad.
• Los cambios en la actividad física y la exposición prolongada a la luz de las pantallas también pueden afectar a la cantidad y calidad del sueño.

Conclusión

Por lo tanto, el uso problemático de las redes sociales puede tener importantes efectos adversos en la salud física y mental. Muchas de estas consecuencias son también factores de riesgo para el desarrollo de los TCA y la obesidad, por lo que el mal uso de las redes sociales puede contribuir al desarrollo de los TCA y la obesidad.